miércoles, mayo 26, 2004


Hoy es el cumpleaños de mi querido retoño, a quien amo con todo mi corazón y por quien daría mi vida y todo lo que tengo.
Aun recuerdo el primer día en que lo vi. Era un hermoso bebe con la piel rosada, sin cabello y con unos enormes y hermosos ojos azules. No sé por qué, pero durante todo el embarazo siempre estuve segura de que sería un niño, y no me equivoque. Nació un día antes del cumpleaños de mi papá, que aunque al principio de mi embarazo estaba molesto y sentido conmigo, con el tiempo se le fue pasando y cuando el bebe nació el era el más feliz.
De aquel día en que nació recuerdo que yo estaba sola en mi casa cuando se me reventó la fuente y no sabía que hacer porque no podía localizar a nadie, en ese tiempo (hace 16 años) no había celulares, así que espere hasta que llegó mi mamá que fue como una hora después. Llegamos al hospital como a las 11:00 PM, mi hijo nació en un hospital del IMSS, cuando llegamos me recibieron de inmediato y me atendieron muy bien, yo no tengo ninguna queja del servicio. Me acuerdo muy bien que escuchaba a todas las señoras que gritaban y yo me asustaba mucho pero me quedaba callada, el doctor venia a revisarme y me preguntaba que como me sentía yo le decía que más o menos, el se reía y me preguntaba que entonces porque no dejaba se sonreír, y a mi me daba más risa, no se si de nervios o que, pero creo que eso fue lo que hizo que me atendieran tan bien porque no me quejaba ni les gritaba. Así pase toda la noche hasta las 11:30 AM del día siguiente que nación mi retoño. El hospital estaba lleno y apenas me subieron al piso me preguntaron que si quería salir ya y yo les dije que si, así que para las 5 de la tarde mi retoño y yo ya estábamos en casita y comenzaron a llegar las visitas. Que emoción sentía cada vez que lo veían y me decían lo bonito que era y como se parecía a mi. Siempre me gusto verlo dormir, me sentía feliz, tenia miedo pero estaba feliz de saber que era mi bebé, que estaba sano.
Ya han pasado 16 años de aquel día, y cada 26 de mayo recuerdo todo eso y se me llenan los ojos de lágrimas por la emoción. Es mi retoño, es mi vida, y lo amo más que a nada en este mundo.

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